De tiro libre define el IMBO
Verano de 1969 y como era habitual en la
segunda mitad de los 60, cada temporada se iniciaba con la disputa del torneo
“Amistad IMBO”.
Estudiantes ya lo había ganado en 1966 y en
esta oportunidad nuevamente estaba a punto de hacerlo. El tricampeón de la Liga
Regional (el celeste venía de ganar los oficiales de 1966, 67 y 68) contaba
para el IMBO ’69 con el refuerzo de Bernardo Patricio Cos, delantero de
Belgrano que luego sería campeón con el Barcelona de Cruyff.
Estudiantes llegaba invicto al último
partido y ahí se definiría el título de campeón. El rival era el clásico,
Atenas, y eso le ponía otro condimento al trascendental encuentro.
El 7 de marzo de 1969 se midieron albos y celestes y el juego no estuvo acorde a las expectativas de la multitud que albergó el estadio. Trámite muy parejo, deslucido y el empate en cero con que se iba el partido parecía inamovible.
El 7 de marzo de 1969 se midieron albos y celestes y el juego no estuvo acorde a las expectativas de la multitud que albergó el estadio. Trámite muy parejo, deslucido y el empate en cero con que se iba el partido parecía inamovible.
Hasta que apareció Percello.
Minuto 41 del segundo tiempo, tiro libre
para Estudiantes y Francisco Antonio Pablo Percello que ejecuta otra de sus
maravillas con pelota parada, vence al arquero Cardozo, pone el 1 a 0 y define
el torneo.
Una vez más el Gringo Percello, tal un
mago, hacía florecer de la nada un gol. Otro truco para consolidar lo mítico de
su leyenda.