domingo, 14 de septiembre de 2014

IRRESOLUCIÓN






Atenas 1 Estudiantes 0
Los momentos de dominio que tuvo Estudiantes no los pudo traducir en jugadas de riesgo, dudó en ciertos pasajes del partido y cuando menos lo esperaba se encontró con un gol en contra irremontable.
En el regreso del clásico Estudiantes trató de imponer de arranque sus mejores virtudes. Tomaba rápido el balón, lo hacía circular e iba constantemente sobre la defensa de Atenas. Sin embargo no encontraba la puntada final para meterse al área y definir. El buen trabajo de los centrales celestes para anticipar, las salidas de Gómez y el control de pelota de los volantes, no hallaba en Dopazo y Ramos la posta necesaria para concluir con peligro cada jugada. De esa vacilación Atenas se alimentó, para salir del cerco y plantear el juego en la mitad de la cancha. Ahí todo se embarulló. El juego asociado desapareció por completo y todo tuvo que ver con los errores, las imprecisiones y meter fuerte. De esos desconciertos defensivos Atenas tuvo su única jugada de riesgo cuando Piris aprovechó un quedo del fondo celeste pero no pudo definir. Estudiantes también encontró un hueco en la línea defensiva local en una jugada de contra a los 44’, que cortó el arquero Testa antes que Pérez recibiera solo.
En el complemento sucedió algo similar. Los primeros minutos fueron de Estudiantes, inofensivo y sin profundidad, ante un Atenas totalmente replegado y sin caminos para salir. Solamente una tuvo el celeste, a los 12’, con un cabezazo de Foglia que se fue apenas sobre el poste derecho. Luego el partido cayó en un pozo. Estudiantes no hallaba las variantes para crecer en ataque. Ingresó Garraza pero no consiguió erigirse como salida y el cambio de ambos delanteros (Colazo y Gigena entraron por Dopazo y Ramos) no acrecentaba el peso ofensivo. Cada intento de ataque terminaba en el embudo de la defensa local que rechazaba a cualquier lado. Los centros fueron la única alternativa que ambos presentaron. Sin forma de avanzar tocando eligieron cortar camino metiendo bochazos a las áreas. Con este método se definió el partido. Minuto 38, en uno de los escasos avances de Atenas se escapa Piris, centro al área que despeja corto Peralta y la bola que le queda al recién ingresado Maldonado que convierte. Aquí, ante lo inesperado, el trastorno fue total. Y no hubo chance de recuperación. Lo que Estudiantes no pudo en 85 minutos y con tranquilidad, menos en sólo 5 y a las apuradas.
Estudiantes no pudo ganar el clásico porque jugó mal, no encontró forma de asistir a sus delanteros y careció de poder de resolución para imponerse. Lo perdió porque Atenas acertó en la única que tuvo.
Síntesis del Partido:
Atenas (1):
Testa (C), Mónaco, Acosta, Becerra, mansilla (Legman), Torradi, Feldman, Sosa (Maldonado), Baigorria, Urbano (Fernández), Piris. DT: Escobar. Suplentes:Delgado, Bearzotti, N. Gómez, Enriz.
Estudiantes (0): Peralta, Gómez, Foglia, Jaime, Giuffré, Formigo (Garraza), Quiroga (C), Pérez, Lucero, Dopazo (Colazo), Ramos (Gigena). DT: Ricardo Dillon. Suplentes: Calabria, Ayelo, Barreto, Flordelmundo.
Gol: Maldonado (st 38’).
Arbitro: Matías Ramos. Estadio: 9 de Julio.

fotos: Marcelo López Tobares y David Lokman