El celeste dominaba el juego, creaba situaciones pero no lograba meterla. Hasta que a los 33 minutos tuvo un tiro libre cerca del vértice derecho del área de Güemes. Beraldi acomodó la pelota, estudió la situación y haciendo gala de su exquisita pegada la clavó en el ángulo ante la estéril volada de Ronco.
En ese primer tiempo Estudiantes era mucho más que el equipo satiagueño. Por el medio con Cabrera y Beraldi, por derecha con el tandem Benavidez - Cainelli y Comba desbordando por cualquiera de las dos puntas, el celeste era indescifrable para Güemes. Recién sobre el minuto 41 la visita se arrimó con peligro al área y ahí apareció Peralta para sacar un tiro de Oliveira.
En el complemento se niveló el trámite. Güemes se adelantó un poco más y le dió algo de trabajo la fondo celeste. Aunque los dos tuvieron sus chances de convertir, las jugadas de Estudiantes fueron más profundas. Mientras que Güemes llegó con un cabezazo desviado de Oliveira y un remate de media distancia de Rivas que desvió muy bien Peralta, Estudiantes puso a Sepúlveda en dos ocasiones cara a cara con Ronco, que salvó su valla poque Bruno no estuvo fino al definir.
Para no dejar pasar el momento y acrecentar la diferencia, a los 30 minutos asomó otra de las variantes de las que hablaba al inicio de la crónica. Tiro libre desde la derecha de Cabrera y García que domina las alturas y cabecea al gol.
Estudiantes ganó dos a cero un partido difícil, porque contó con las alternativas suficientes para traducir en gol lo que genera el equipo.
Síntesis del Partido
Estudiantes (2): Peralta, Benavidez, Maffini, Foglia (C), García, Cainelli (Fenoglio), Cabrera, Beraldi (Abataneo), Mattea (Cuello), Comba, Sepúlveda. DT: Marcelo Vázquez. Suplentes: Bigo, Laspina, Montejano, Marchini.
Güemes (0): Ronco, Yocca (C), Martínez, Mela (Jaime), Rivas, Martínez (Escobar), Sánchez, Estepa, Lettari, Oliveira, Varaldo (Ferreira). DT: Ramón Amaya. Suplentes: Salto, Moreno, Sandoval, Castaño.
Goles: Beraldi (pt 33'), García (st 30').
Arbitro: M. Macheroni. Estadio Antonio Candini.
