miércoles, 27 de noviembre de 2019

PRIMERA NACIONAL: CUANDO UN EMPATE ES MUCHO MÁS QUE UN PUNTO






Matemáticamente Estudiantes igualó ante Barracas Central y se quedó con una unidad.
Simbólicamente ese "1" representa muchas cosas.
Significa la reafirmación de una localía que lleva a los eventuales visitantes a tomar más recaudos que los habituales. También la madurez de un equipo para en menos de una rueda adaptarse a una categoría desconocida y que exige muchísimo. Ese "1" que Estudiantes consiguió al empatar el lunes por la tarde en el Candini, califica el momento de felicidad que vive el pueblo celeste por este presente venturoso.

Cada partido tiene sus avatares. Esas vicisitudes que lo tornan cambiante y determinan momentos adversos y favorables.
Como ya lo he expresado en otras oportunidades, este Estudiantes tiene como una de sus principales virtudes el poder de la observación y la capacidad de cambio. Jugadores y cuerpo técnico monitorean y evalúan la situación que presenta el juego y tras el análisis actúan en consecuencia. Puede quedar la sensación de ser superados, porque el rival también juega y ese ejercicio puede llevar un cierto tiempo, sin embargo cuando descubre lo que debería ser el juego cambia rotundamente y toma el rol de dominador. La verdad se revela.


Barracas sorpendió en el inicio del partido a Estudiantes. Con un jugador inteligente como Valenzuela complicó al celeste en esos primeros pasajes.
Tomando nota de esto y ajustando algunas marcas el trámite se emparejó: la peligrosidad de Barracas fue menguando y Estudiantes fue por más.
En el arranque del complemento Marcelo Vázquez hizo ingresar a Cabrera y Arismendi, reafirmando las aspiraciones celestes.
La expulsión de Cevasco cuando solo se jugaban 5 minutos del segundo tiempo llevaron a rearmar el esquema (ingresó Zbrun por Ferreira para equilibrar el mediocampo) y a encarar la búsqueda de otra forma. Sin la presencia del ariete paraguayo Estudiantes cambió intensidad por manejo. Con mucha inteligencia hizo circular la pelota a la espera del momento adecuado para hacer daño.
Faltó solo el gol. Tuvo oportunidades, pero Barracas se refugió muy bien atrás.
El partido terminó igualado.
Estudiantes cerraba como local su inolvidable año. Para la celebración se quedó con un empate que es muchísimo más que un punto. Es mantenernos con esa sensación de plenitud por como la fortuna nos sonríe.

SÍNTESIS DEL PARTIDO
ESTUDIANTES (0):
A. Peralta; Benavidez, Foglia (Cabrera), Vester, Suárez; Cainelli, Cevasco (expulsado st 5'), Beraldi (Arismendi), Bottino; Ferreira (Zbrun), Sepúlveda. DT: Marcelo Vázquez. Suplentes: Olivera, Formica, Cuello, M. Peralta
BARRACAS CENTRAL (0): Gómez; M. Rodríguez, Ortíz, Bojanich, Bontempo; López, González (Cuello), Pinto, Colitto; Valenzuela (I. Tapia), Niell (Pacheco). DT: Cristian Aldirico. Suplentes: Mollor, M. Tapia, Córdoba, Minici.
Arbitro: Pablo Dovalo. Estadio Antonio Candini.