Una dolencia física venía postergando su debut en esta temporada de la Primera Nacional. El pasado sábado fue incluído en el banco de suplentes, esperó 58 minutos y cuando le tocó ingresar, a los pocos segundos y en la primera pelota que tocó, hizo lo que lo distingue: el gol.
Javier Ferreira está de regreso y en plenitud. En horas de la siesta, en conferencia de prensa por Zoom, el ariete guaraní dejó sus impresiones sobre el triunfo de Estudiantes ante Alvarado.
"Volver así es algo muy lindo", comenzó diciendo. "Desde el torneo pasado (el 2019/20) que no convertía y para mi es muy importante para seguir trabajando con ansías y seguir por ese camino, que es lo que tengo que hacer adentro de una cancha", expresó Javier sobre lo que sintió en su vuelta al equipo principal.
Ante la consulta de si este primer triunfo fue tomado con tranquilidad o un desahogo, Ferreira comentó que "para mi es un poquito de cada cosa. Un desahogo, y también nos motiva a seguir por este camino, que es lo que buscamos siempre, en todos los partidos anteriores también, asi que ahora hay que motivarse para seguir sumando de a tres".
En cuanto a la impresión que le dejó el juego desplegado por el equipo manifestó que "creo que fue uno de los mejores partidos, el segundo tiempo ante Tigre me gustó también. Esto es un proceso largo y tenemos que seguir trabajando de igual manera, y estoy convencido de que Estudiantes va a llegar al punto donde estabamos antes y ser de nuevos protagonistas del torneo".
Cosas de Goleadores
Siempre se dice que los goleadores tienen un olfato especial, un don para aprovechar la más mínima situación que se les presenta para convertir. Y lo sucedido el sábado ante Alvarado, cuando Javier Ferreira ingresó al campo de juego, fue directamente a posicionarse en el centro del área y cuando le llegó la primera pelota convirtió, nos llevó a recordar una situación similar, ocurrida el 1 de octubre de 2006, cuando ante Trinidad de San Juan, el goleador histórico de Estudiantes, Luis Di Santo, ingresó reemplazando a Búffali, fue derecho al área y de igual manera, en su primer contacto, marcó el gol. ¡Los goleadores son así!.
