En día como hoy de 1985, Estudiantes iniciaba su última participación en un torneo de Primera División de AFA. Para rememorar tan histórica fecha, además de la infografía que refleja la campaña en el Nacional de 1985, reproducimos una nota que publicamos en la revista Página Celeste en abril de 2005.Estudiantes se va a Córdoba
Hubo un tiempo en que estábamos en lo alto del espectro futbolístico en la Provincia. Si no mandábamos, le peleábamos de igual a igual a los mejores. Ante nuestras filas sucumbían los más recios y duros equipos de Córdoba capital (Belgrano, Juniors, Las Palmas, All Boys, USV) y los batalladores del "interior" como Alumni de Villa María y Sportivo Belgrano de San Francisco. El objetivo era uno solo: quedarse con alguna de las 2 plazas fijas que Córdoba tenía para el Campeonato Nacional. Como 3 de los grandes de la capital ya estaban instalados en Primera División, para completar el cuarteto cordobés, Belgrano era beneficiado con innumerables ventajas de árbitros y dirigentes. Como el Quijote, Estudiantes de Río Cuarto no se resignaba al papel secundario que le querían imponer, y a sopapo limpio (esperando la Plaza Fija que tantas veces prometió Grondona y nunca llegó para la Liga de Río Cuarto) se debatía frente al pirata. En 1984, por primera vez, abandonamos nuestra Liga y fuimos a jugar a la ACF. Muchos creen que las aspiraciones de Antonio Candini nos hicieron emigrar. Lo cierto es que ya desde 1949 se encuentran noticias que hablan de la decisión de Estudiantes de buscar otros horizontes. Para encarar esta contingencia el celeste armó un equipo de antología: a la defensa netamente local (Walter Gómez, Luis Carranza, Acevedo y Felizzia) se le sumó el experimentado arquero santafecino Carlos Trucco. El mediocampo fue netamente cordobés: Pablo Ortiz, Mario Mentil y Angel Feliú. La delantera fue la vedette del equipo: el uruguayo Eber Bueno (que venía de San Lorenzo de Almagro), Andrés Cossio y Sergio Coleoni. A ellos se les sumaban Rosané, Viano,Burki, el melena Roccia, Magallanes, Arias, Jorge Rodriguez y el uruguayo Eduardo Sobrino Di Fabio. Todos ellos comandados por la simpleza de Jorge Omar Sturniolo, especialista en grandes equipos. El proceso lo había iniciado Roberto Resquin, pero se fue a 3 fechas de comenzado el campeonato. La historia es por demás conocida. Estudiantes como se preveía llegó a la final con Belgrano, perdió de visitante y la vuelta en Río Cuarto no se jugó porque Belgrano así lo quiso: ideó y llevó a cabo el hecho más trágico que vivimos en nuestras canchas. Los piratas, liderados por el presidente de Belgrano Walter Spengler, tomaron por asalto las tribunas ocupadas por los parciales de Estudiantes y el saldo fue de varios heridos que incluyó el disparo de arma de fuego que recibió el "Poli" Coronel en el abdomen. El crimen quedó impune y el único castigado fue Estudiantes que tuvo que ir a jugar la revancha a Córdoba, la cual perdió.
Entre fines del 84 y el verano de 1985 se disputó el Provincial que le otorgaba al campeón la 2ª plaza al Nacional. Como hecho anecdótico cabe destacar que una de las zonas la integraba Deportivo Italiano, club en el cual jugaban varios ex Estudiantes. Para este torneo se contrató al delantero Ángel Rubén Campagna, que tuvo una destacada actuación. El trámite del certamen fue durísimo y después de avanzar a paso firme las 2 primeras instancias Estudiantes arribó a la fase final, que disputó en forma reñida con Belgrano, Juniors, Alumni, Sportivo Belgrano y USV, con partidos cada dos días, denuncias de soborno e incentivación y escándalos que alcanzaron magnitud nacional como el del DT de Belgrano, Victorio Cocco y su arquero Juan Manuel Ramos. Todo marchaba bien hasta la última fecha en la que Estudiantes perdía inesperadamente de local frente a Alumni y resignaba el subcampeonato que le daba el pasaje directo al Nacional ya que Belgrano nuevamente había sido campeón. Para determinar quien iba al Nacional se jugaron 2 partidos en cancha neutral. El primero, en Instituto, Estudiantes venció 2 a 1 a Alumni con goles de Coleoni y Magallanes. El segundo, vaya jugada del destino, se jugó en la cancha de Belgrano y con gol de Cossio Estudiantes se clasificó a su tercer Nacional.
El último Nacional
El tiempo de preparación fue mínimo, pero un amistoso frente a San Lorenzo, a pesar de la derrota, dejó la sensación de que Estudiantes tenía un equipo poderoso. Dejaron el club Bueno, Cossio y Sobrino, y se contrató a Bigi, Mulinari, Mario Cariaga, Bartolucci, Victor Crema, Roberto Corró y al convocante y recientemente dejado libre de Boca, Roberto Mouzo.
El debut fue una derrota de visitante frente a Temperley. A la fecha siguiente recibió en el Ciudad de Río Cuarto al Boca de Alfredo Di Stéfano. El primer tiempo fue un monólogo xeneize frente al arco de Trucco, hasta que en el minuto 45 roba Corró una pelota en su campo, pared con Mentil y pase a Cariaga que se lleva las marcas y habilita a Crema, que solo, define por encima de Balerio y convierte. En la 2ª etapa Boca empata con un gol en contra de Rosané, pero el dominio del partido fue celeste, al punto de que Di Stéfano bajo la persiana faltando 20 minutos al cambiar los 2 delanteros por defensores. En la 3ª jornada se consiguió un importante triunfo de visitante frente a Altos Hornos. Con goles de Cariaga y Coleoni, en un minuto, Estudiantes dio vuelta el partido. En la 4ª fecha, Boca se tomó el desquite y despachó al celeste con un inapelable 7 a 1. Frente a los jujeños, en la 5ª fecha, Estudiantes obtuvo su primer triunfo de local y recibió a Temperley con chances de clasificar. La fiesta fue total, el público colmó el estadio y Estudiantes consiguió su mayor triunfo al vencer a los bonaerenses por 5 a 0, coronados por un espectacular gol de palomita de Mario Cariaga y un día de gloria de Víctor Crema.
Para la 2ª etapa el rival fue una de las sensaciones del torneo: San Martín de Tucumán. El primer encuentro fue para los tucumanos que se impusieron 4 a 2. La revancha en Río Cuarto fue una jornada de júbilo a pesar de la lluvia. La cancha repleta varias horas antes del partido (fue la 4ª recaudación de la fecha) mostró un show de hinchadas que finalizó en el medio de la cancha con un abrazo e intercambio de gorros y banderines entre un hincha tucumano y un león. Para matizar la espera los acróbatas chinos hicieron gala de sus destrezas físicas. Estudiantes llegaba tras 3 días de conflicto con los dirigentes por los premios, lo que motivó que la noche antes al partido abandonaran la concentración. En la cancha las tensiones no se notaron y Estudiantes se llevó por delante a San Martín, pero no pudo convertir. Un arbitraje parcial de Demaro (omitió sancionar una trompada a Crema, un penal que también le cometieron al 9 y expulso sin muchos motivos a Campagna) desató la bronca de los hinchas y la jornada terminó con disturbios.
Para la rueda de perdedores, Estudiantes fue a jugar, en cancha neutral, a General Pico frente a Temperley. Una pálida imagen del equipo que fue, dejó escapar la oportunidad de avanzar, y la derrota por 1 a 0 coronó el último partido de Estudiantes en Primera División.
Marcelo Roberto López Tobares
Hubo un tiempo en que estábamos en lo alto del espectro futbolístico en la Provincia. Si no mandábamos, le peleábamos de igual a igual a los mejores. Ante nuestras filas sucumbían los más recios y duros equipos de Córdoba capital (Belgrano, Juniors, Las Palmas, All Boys, USV) y los batalladores del "interior" como Alumni de Villa María y Sportivo Belgrano de San Francisco. El objetivo era uno solo: quedarse con alguna de las 2 plazas fijas que Córdoba tenía para el Campeonato Nacional. Como 3 de los grandes de la capital ya estaban instalados en Primera División, para completar el cuarteto cordobés, Belgrano era beneficiado con innumerables ventajas de árbitros y dirigentes. Como el Quijote, Estudiantes de Río Cuarto no se resignaba al papel secundario que le querían imponer, y a sopapo limpio (esperando la Plaza Fija que tantas veces prometió Grondona y nunca llegó para la Liga de Río Cuarto) se debatía frente al pirata. En 1984, por primera vez, abandonamos nuestra Liga y fuimos a jugar a la ACF. Muchos creen que las aspiraciones de Antonio Candini nos hicieron emigrar. Lo cierto es que ya desde 1949 se encuentran noticias que hablan de la decisión de Estudiantes de buscar otros horizontes. Para encarar esta contingencia el celeste armó un equipo de antología: a la defensa netamente local (Walter Gómez, Luis Carranza, Acevedo y Felizzia) se le sumó el experimentado arquero santafecino Carlos Trucco. El mediocampo fue netamente cordobés: Pablo Ortiz, Mario Mentil y Angel Feliú. La delantera fue la vedette del equipo: el uruguayo Eber Bueno (que venía de San Lorenzo de Almagro), Andrés Cossio y Sergio Coleoni. A ellos se les sumaban Rosané, Viano,Burki, el melena Roccia, Magallanes, Arias, Jorge Rodriguez y el uruguayo Eduardo Sobrino Di Fabio. Todos ellos comandados por la simpleza de Jorge Omar Sturniolo, especialista en grandes equipos. El proceso lo había iniciado Roberto Resquin, pero se fue a 3 fechas de comenzado el campeonato. La historia es por demás conocida. Estudiantes como se preveía llegó a la final con Belgrano, perdió de visitante y la vuelta en Río Cuarto no se jugó porque Belgrano así lo quiso: ideó y llevó a cabo el hecho más trágico que vivimos en nuestras canchas. Los piratas, liderados por el presidente de Belgrano Walter Spengler, tomaron por asalto las tribunas ocupadas por los parciales de Estudiantes y el saldo fue de varios heridos que incluyó el disparo de arma de fuego que recibió el "Poli" Coronel en el abdomen. El crimen quedó impune y el único castigado fue Estudiantes que tuvo que ir a jugar la revancha a Córdoba, la cual perdió.
Entre fines del 84 y el verano de 1985 se disputó el Provincial que le otorgaba al campeón la 2ª plaza al Nacional. Como hecho anecdótico cabe destacar que una de las zonas la integraba Deportivo Italiano, club en el cual jugaban varios ex Estudiantes. Para este torneo se contrató al delantero Ángel Rubén Campagna, que tuvo una destacada actuación. El trámite del certamen fue durísimo y después de avanzar a paso firme las 2 primeras instancias Estudiantes arribó a la fase final, que disputó en forma reñida con Belgrano, Juniors, Alumni, Sportivo Belgrano y USV, con partidos cada dos días, denuncias de soborno e incentivación y escándalos que alcanzaron magnitud nacional como el del DT de Belgrano, Victorio Cocco y su arquero Juan Manuel Ramos. Todo marchaba bien hasta la última fecha en la que Estudiantes perdía inesperadamente de local frente a Alumni y resignaba el subcampeonato que le daba el pasaje directo al Nacional ya que Belgrano nuevamente había sido campeón. Para determinar quien iba al Nacional se jugaron 2 partidos en cancha neutral. El primero, en Instituto, Estudiantes venció 2 a 1 a Alumni con goles de Coleoni y Magallanes. El segundo, vaya jugada del destino, se jugó en la cancha de Belgrano y con gol de Cossio Estudiantes se clasificó a su tercer Nacional.
El último Nacional
El tiempo de preparación fue mínimo, pero un amistoso frente a San Lorenzo, a pesar de la derrota, dejó la sensación de que Estudiantes tenía un equipo poderoso. Dejaron el club Bueno, Cossio y Sobrino, y se contrató a Bigi, Mulinari, Mario Cariaga, Bartolucci, Victor Crema, Roberto Corró y al convocante y recientemente dejado libre de Boca, Roberto Mouzo.
El debut fue una derrota de visitante frente a Temperley. A la fecha siguiente recibió en el Ciudad de Río Cuarto al Boca de Alfredo Di Stéfano. El primer tiempo fue un monólogo xeneize frente al arco de Trucco, hasta que en el minuto 45 roba Corró una pelota en su campo, pared con Mentil y pase a Cariaga que se lleva las marcas y habilita a Crema, que solo, define por encima de Balerio y convierte. En la 2ª etapa Boca empata con un gol en contra de Rosané, pero el dominio del partido fue celeste, al punto de que Di Stéfano bajo la persiana faltando 20 minutos al cambiar los 2 delanteros por defensores. En la 3ª jornada se consiguió un importante triunfo de visitante frente a Altos Hornos. Con goles de Cariaga y Coleoni, en un minuto, Estudiantes dio vuelta el partido. En la 4ª fecha, Boca se tomó el desquite y despachó al celeste con un inapelable 7 a 1. Frente a los jujeños, en la 5ª fecha, Estudiantes obtuvo su primer triunfo de local y recibió a Temperley con chances de clasificar. La fiesta fue total, el público colmó el estadio y Estudiantes consiguió su mayor triunfo al vencer a los bonaerenses por 5 a 0, coronados por un espectacular gol de palomita de Mario Cariaga y un día de gloria de Víctor Crema.
Para la 2ª etapa el rival fue una de las sensaciones del torneo: San Martín de Tucumán. El primer encuentro fue para los tucumanos que se impusieron 4 a 2. La revancha en Río Cuarto fue una jornada de júbilo a pesar de la lluvia. La cancha repleta varias horas antes del partido (fue la 4ª recaudación de la fecha) mostró un show de hinchadas que finalizó en el medio de la cancha con un abrazo e intercambio de gorros y banderines entre un hincha tucumano y un león. Para matizar la espera los acróbatas chinos hicieron gala de sus destrezas físicas. Estudiantes llegaba tras 3 días de conflicto con los dirigentes por los premios, lo que motivó que la noche antes al partido abandonaran la concentración. En la cancha las tensiones no se notaron y Estudiantes se llevó por delante a San Martín, pero no pudo convertir. Un arbitraje parcial de Demaro (omitió sancionar una trompada a Crema, un penal que también le cometieron al 9 y expulso sin muchos motivos a Campagna) desató la bronca de los hinchas y la jornada terminó con disturbios.
Para la rueda de perdedores, Estudiantes fue a jugar, en cancha neutral, a General Pico frente a Temperley. Una pálida imagen del equipo que fue, dejó escapar la oportunidad de avanzar, y la derrota por 1 a 0 coronó el último partido de Estudiantes en Primera División.
Marcelo Roberto López Tobares
