En Juniors vimos 2 versiones de
Estudiantes. Dos imágenes muy distintas una de la otra. La del primer tiempo,
apática e irresoluta, que se dejó dominar por un rival que apenas ofrecía un
poco de orden al medio. En cambio la del segundo tiempo, y a pesar de la
inmerecida derrota final, muestra un Estudiantes camino al ideal.
En casi toda la etapa inicial Estudiantes
jamás le encontró la vuelta al juego. Schiavoni, López y Flordelmundo asumían
el rol de la conducción pero no lo podían desarrollar. Los volantes de Juniors
se plantaron mejor, presionaban mucho y no sólo cortaban el circuito de juego
celeste sino que se proyectaban con peligro en ofensiva. Pero Juniors hacía
porque el celeste lo dejaba.
Estudiantes avisó a los 16’ con un remate de afuera de López que sacó el arquero al tiro de esquina. De esa jugada nació el primer gol de Juniors, cuando Sánchez salió en velocidad y sacó un tremendo remate inatajable para Peralta. El celeste no tuvo reacción tras el gol y en una jugada similar a la anterior, a los 27’, Juniors casi marca el segundo, pero en esta ocasión Sánchez eligió enfrentar mano a mano a Peralta y ganó el arquero. En los minutos finales los volantes celestes se juntaron más y Colazo y Peirone comenzaron a gravitar en el área. A los 44’ Estudiantes empató: centro de López y Colazo que en el corazón del área no perdonó.
Esos instantes finales fueron el preludio de lo que vendría. Y si, como escribí al principio, el segundo tiempo fue una representación de lo que puede ser el mejor Estudiantes. Barreto se ocupó de la contención y López y Schiavoni, asociados, mostraron sus mejores cualidades. Adelante la dupla Colazo – Peirone se encargaba de llevar el peligro. Juniors no tuvo respuesta ante esto. A los 20’ ante una tijera de Peirone se lució el arquero Gómez sacándola de abajo, en el minuto 23 centro de Peirone que empalma Colazo y otra vez el arquero. A los 35’ fue la más clara cuando Peirone se fue por derecha y su tiro cruzado fue devuelto por el travesaño. Estudiantes hizo todo para ganarlo y lo tenía ahí. Los ingresos de Puñet y Cabrera habían mantenido el equilibrio y al entrar Saez quedaba la sensación de que era para definir el partido. Sin embargo en el agregado se quedó con las manos vacías cuando el cabezazo de Urbano terminó dentro del arco de Peralta.
Estudiantes perdió en Córdoba y este partido debe servir de punto de partida. Primero para que quede en claro lo que Estudiantes no debe volver a hacer (repetir esa actuación del primer tiempo) y segundo para tomar conciencia de que lo que pretende Mattea (“el fútbol que juega Estudiantes”) se puede llevar a cabo. Falta un poco de rodaje y ajustar ciertos puntos, pero la idea y quienes la pueden hacer realidad están.
Síntesis del Partido
G. P. Juniors (2): Gómez, Cabaña, Galanga, Beterette, Tissera, Sánchez (Duveaux), Aguirre (C), Lescano (Doblas), Arguello, Martínez (Ranaudo), Urbano. DT: Rubén Rodríguez. Suplentes: Oliva, E. Gómez, Galarraga, N. López.
Estudiantes (1): Peralta, Gómez, Moreyra, Palandri (C), Ayelo (Puñet), Schiavoni, Barreto, Flordelmundo (Cabrera), López, Colazo (Saez), Peirone. DT: Hugo Mattea. Suplentes: Mancinelli, G. Garro, Scoponi, Gorosito.
Goles: Sánchez (pt 17'), Colazo (pt 44'), Urbano (st 47').
Arbitro: Fernando Marquez (San Francisco). Cancha: G.P. Juniors (Córdoba).
Estudiantes avisó a los 16’ con un remate de afuera de López que sacó el arquero al tiro de esquina. De esa jugada nació el primer gol de Juniors, cuando Sánchez salió en velocidad y sacó un tremendo remate inatajable para Peralta. El celeste no tuvo reacción tras el gol y en una jugada similar a la anterior, a los 27’, Juniors casi marca el segundo, pero en esta ocasión Sánchez eligió enfrentar mano a mano a Peralta y ganó el arquero. En los minutos finales los volantes celestes se juntaron más y Colazo y Peirone comenzaron a gravitar en el área. A los 44’ Estudiantes empató: centro de López y Colazo que en el corazón del área no perdonó.
Esos instantes finales fueron el preludio de lo que vendría. Y si, como escribí al principio, el segundo tiempo fue una representación de lo que puede ser el mejor Estudiantes. Barreto se ocupó de la contención y López y Schiavoni, asociados, mostraron sus mejores cualidades. Adelante la dupla Colazo – Peirone se encargaba de llevar el peligro. Juniors no tuvo respuesta ante esto. A los 20’ ante una tijera de Peirone se lució el arquero Gómez sacándola de abajo, en el minuto 23 centro de Peirone que empalma Colazo y otra vez el arquero. A los 35’ fue la más clara cuando Peirone se fue por derecha y su tiro cruzado fue devuelto por el travesaño. Estudiantes hizo todo para ganarlo y lo tenía ahí. Los ingresos de Puñet y Cabrera habían mantenido el equilibrio y al entrar Saez quedaba la sensación de que era para definir el partido. Sin embargo en el agregado se quedó con las manos vacías cuando el cabezazo de Urbano terminó dentro del arco de Peralta.
Estudiantes perdió en Córdoba y este partido debe servir de punto de partida. Primero para que quede en claro lo que Estudiantes no debe volver a hacer (repetir esa actuación del primer tiempo) y segundo para tomar conciencia de que lo que pretende Mattea (“el fútbol que juega Estudiantes”) se puede llevar a cabo. Falta un poco de rodaje y ajustar ciertos puntos, pero la idea y quienes la pueden hacer realidad están.
Síntesis del Partido
G. P. Juniors (2): Gómez, Cabaña, Galanga, Beterette, Tissera, Sánchez (Duveaux), Aguirre (C), Lescano (Doblas), Arguello, Martínez (Ranaudo), Urbano. DT: Rubén Rodríguez. Suplentes: Oliva, E. Gómez, Galarraga, N. López.
Estudiantes (1): Peralta, Gómez, Moreyra, Palandri (C), Ayelo (Puñet), Schiavoni, Barreto, Flordelmundo (Cabrera), López, Colazo (Saez), Peirone. DT: Hugo Mattea. Suplentes: Mancinelli, G. Garro, Scoponi, Gorosito.
Goles: Sánchez (pt 17'), Colazo (pt 44'), Urbano (st 47').
Arbitro: Fernando Marquez (San Francisco). Cancha: G.P. Juniors (Córdoba).
