Hoy 24 de mayo de 2010 se cumple un año de la victoria de Estudiantes sobre Crucero del Norte, por la primera final del Argentino B 2008/09. Ese triunfo es uno de los más importantes de la historia de Estudiantes. Porque era una final, por el juego desplegado en cancha, la importancia del rival que se venció y la masiva movilización de hinchas celestes a Posadas.
Las claves del triunfo
Sorpresa generó en el hincha el ver la formación titular instantes antes de empezar el partido: Gómez por Búffali y Bottino que de volante pasaba a jugar adelante. Con la dinámica y el quite de Gómez y la marca y la ubicación de Pérez, , el planteo de Mattea anulaba por completo el juego de Marzuck, vital para el funcionamiento de Crucero, y lo obligaba a generar un desgaste físico que al final sería determinante. Si miraba hacia delante se encontraba con la dupla Gómez – Pérez, cuando giraba hacia su arco corría de atrás a Bottino (imparable y figura), Nico Rodríguez y Chiaretta. También Estudiantes golpeó a Crucero en momentos claves, convirtiendo Bottino los dos primeros goles de cabeza a los 4’ del primer tiempo y a los 3’ del complemento y el tercero a los 30’ en el mejor período del local. Así Estudiantes le mojó la oreja a Crucero (esa tarde perdía su invicto de local), y lo llevó a buscar el arco de Mancinelli de manera desesperada. El sacrificio celeste aguantó el resultado de una jornada gloriosa.
“Épica, así fue la victoria de Estudiantes en Posadas. Una gesta gloriosa que quedará en la memoria de muchos”. Con estas palabras iniciaba la crónica de aquel partido y no quedan dudas que esa página de oro de la historia de Estudiantes se convirtió en algo inolvidable.
Las claves del triunfo
Sorpresa generó en el hincha el ver la formación titular instantes antes de empezar el partido: Gómez por Búffali y Bottino que de volante pasaba a jugar adelante. Con la dinámica y el quite de Gómez y la marca y la ubicación de Pérez, , el planteo de Mattea anulaba por completo el juego de Marzuck, vital para el funcionamiento de Crucero, y lo obligaba a generar un desgaste físico que al final sería determinante. Si miraba hacia delante se encontraba con la dupla Gómez – Pérez, cuando giraba hacia su arco corría de atrás a Bottino (imparable y figura), Nico Rodríguez y Chiaretta. También Estudiantes golpeó a Crucero en momentos claves, convirtiendo Bottino los dos primeros goles de cabeza a los 4’ del primer tiempo y a los 3’ del complemento y el tercero a los 30’ en el mejor período del local. Así Estudiantes le mojó la oreja a Crucero (esa tarde perdía su invicto de local), y lo llevó a buscar el arco de Mancinelli de manera desesperada. El sacrificio celeste aguantó el resultado de una jornada gloriosa.
“Épica, así fue la victoria de Estudiantes en Posadas. Una gesta gloriosa que quedará en la memoria de muchos”. Con estas palabras iniciaba la crónica de aquel partido y no quedan dudas que esa página de oro de la historia de Estudiantes se convirtió en algo inolvidable.
