Las manifestaciones públicas de confianza sobre como revertir el complicado presente futbolístico de Estudiantes se desvanecieron en una semana. Hoy, después de que las derrotas ante All Boys y Nueva Chicago dejaran de lado el recuerdo del triunfo ante Atlético Tucumán por Copa Argentina, Marcelo Vázquez deja de ser el director técnico de Estudiantes. "Tomo la determinación de dar un paso al costado" comienza diciendo el DT en un mensaje que difundió en sus redes sociales. "Lo hago pensando en que un cambio de aire puede ser mejor" continuó diciendo, para culminar que Estudiantes está porencima de todo.
Desde la institución manifestaron a través de un comunicado que "es el momento iniciar otro camino" y que desde la dirigencia y la comisión técnica se decidió que asumirá Seferino Flores en un interinato.
Recuerdo una charla con Marcelo Vázquez al principio de la pre temporda, cuando se abrieron algunas prácticas a la prensa, en la que me manifestaba su optimismo por esta campaña y por el plantel que se podía conformar. Después, al iniciarse el camino de los amistosos previos y la fecha del arranque del torneo se acercaba, ya se hablaba de que faltaba algo más de tiempo de trabajo. Este mensaje se potenció al no conseguirse resultados en las fechas iniciales. Aunque se logró una levantada con tres triunfos consecutivos, a partir de la fecha 8 no se pudo mantener una regularidad en cuanto a juego y resultados. Mayo se inició con la intención de renuncia de Vázquez, se decidió tomar un plazo de tres partidos, que incluía el de Copa Argentina, y Alicio Dagatti le ratificó totalmente la confianza (al DT y al plantel), más cuando se ganó ante Atlético Tucumán. Sin embargo esa euforia pasó velozmente cuando con dos derrotas consecutivas Estudiantes pasó a ubicarse en los puestos para mantener la categoría.
Otra vez se va Marcelo Vázquez, en una situación totalmente distinta a lo que lo hizo la primera vez. Quizás sea cierto que faltó tiempo de trabajo previo, pero también que en la competencia pocos jugadores demostraron su nivel y otros ni siquiera pudieron ser considerados como alternativa al momento de buscar soluciones para un mejor equipo. Como sea y más allá de lo que indiquen los números, el agradecimiento a Marcelo Vázquez será imborrable.
