Por más que el resultado del partido entre Estudiantes y Tristán Suárez haya sido empate, hubo un aspecto en el que el celeste fue triunfador: el rendimiento futbolístico.
Sin lugar a dudas el equipo de Flores redondeó su mejor actuación en el torneo. Ante un equipo que solo vino a defenderse y tuvo fortuna para abrir el marcador, ofreció buen trato de pelota, verticalidad, despliegue y sacrificio. Solamente le faltó un poco de serenidad al momento de culminar las jugadas de ataque. De haber estado fino en la definición el resultado final hubiese sido otro.
Desde el comienzo del partido Estudiantes encontró en su ala izquierda territorio fértil para desbordar la defensa visitante. El tandem Ihitz - Abraham fue imparable, especialmente este último, que en cada subida culminaba metiendo la pelota al área. Promediando la etapa inicial Tristán Suárez se animó a algo más, cuando hasta ese momento solo había limitado sus esfuerzos a anular los intentos celestes. Oyola se alejó de la marca de Padilla, se ubicó detrás de la línea de volantes locales por la derecha y por ahí generó la única jugada de peligro de su equipo y que terminó en gol. Minuto 33, avanzó Oyola y desde el vértice del área grande sacó un zurdazo inatajable para Bigo.
Estudiantes salió con todo a buscar el empate, pero seguía faltando ese toque cúlmine. La resistencia lechera pareció caer al final del primer tiempo cuando Franklin marcó un penal para el celeste. Arturia cobró la falta pero su disparo se fue desviado.
La segunda etapa comenzó con Belluschi en cancha reemplazando a Ihitz. Abraham se retrazó al lateral, aunque solo en los papeles, ya que en la práctica su hábitat fue el área visitante jugando casi de extremo y llevando adelante la mayoría de los ataques.
El ingreso del oriundo de Los Quirquinchos le dió otra imagen al celeste. Con sus toques y visión de juego fue ofreciendo variantes. La entrada de Olivera, a los 21 minutos, presentó otra alternativa ofensiva desde la derecha. Cubierto todos los sectores era cuestión de esperar el momento en que Estudiantes se pusiera a tiro. Sin embargo fue Tristán Suárez el que volvió a estar cerca del gol en dos oportunidades, en las que se topó con Bigo en toda su magnitud.
El partido se iba en derrota hasta que pasado el minuto 40 desbordó Reynaga (quién hacía su debut) y su centro dió en una mano. Franklin volvió a cobrar penal y después de varios minutos de protestas, Padilla convirtió abriendo su pie zurdo y dejó el marcador 1 a 1.
El cierre del partido fue un tiro libre a pedir de Belluschi, en el que el ángulo derecho se interpuso para evitar un golazo.
Gran partido de Estudiantes en cuanto al juego desde todas sus aristas. Trató bien la pelota, buscó siempre y se ofreció sin guardarse nada. Faltó el toque final que coronase tan buena actuación.
Síntesis del Partido
Estudiantes (1): Bigo, Bonacorso, Maffini, Padilla, Ihitz (Belluschi), Romero, Pavón (Rosales), Talpone (M. Olivera), Abraham, Arturia, Silba (Reynaga). DT: Seferino Flores. Suplentes: B. Olivera, Zurbriggen, Bottino.
Tristán Suárez (1): Correa, Bettini, Iriarte, Cucco (expulsado st 43'), Muller, Comignaghi, Aquino, Oyola (Oliva), Messiniti, Mellillo (Molina), Barreto (Quiroga). DT: Gastón Pernía. Suplentes: Bacheri, Canzoniero, Brambillo, Garay.
Goles: Oyola (pt 33'), Padilla (st 46' penal)
Arbitro: Adrián Franklin. Estadio Antonio Candini.